Ubicada en pleno desierto, la región de Atacama nos ofrece trekking, paseos náuticos, buceo, kayak, ascenso a montañas, astroturismo e incluso sandboard lo que hace de esta zona un destino predilecto para aventureros
Escoger un lugar para nuestras siguientes vacaciones es siempre un desafío, sobre todo en estos tiempos donde estamos bombardeados de información y destinos impresionantes alrededor del mundo.
Sin embargo, para encontrar paisajes sacados de postales no es necesario ir tan lejos, gracias a la geografía que posee el territorio nacional, dentro de Chile es posible visitar increíbles atractivos y, la macrozona norte es de aquellos lugares que posee la mixtura perfecta entre desierto, playas cristalinas y un frondoso valle tal y como lo podemos ver en lejanos y míticos países como Marruecos.
Al adentrarnos por la ruta 5 norte, ingresamos al kilometro 660 que aguarda Vallenar, el corazón del Valle de Huasco, el inicio de una travesía donde el rio Huasco es el encargado de dar color y forma al jardín de Atacama, nos encontramos con el verde perfecto que hace contraste con la viva imagen del árido desierto, donde las estrellas son los Olivos y la Vid, junto a sus derivados , en esta zona podemos realizar, trekking y recorridos en bicicletas que nos dejarán absortos con los despejados cielos nocturnos.
Al oeste, encontramos uno de los cuatro parques nacionales de la región, Llanos del Challe, arena blanca, un tranquilo mar en colores celestes y viva fauna endémica es lo que nos dispone este rincón bien cuidado de la macrozona norte que nos permite hacer un trekking apto para toda la familia.
Siguiendo la ruta costera, partimos en búsqueda de los cetáceos del desierto, cuna que cobija a los mamíferos más pequeños y los más grandes del mundo: Chañaral de Aceituno, que además deslumbra cada año con su muestra gastronómica con el festival del loco, producto que nos deleita durante 365 días en la caleta, así como también lo hacen la flora y fauna marina local, para visitarla se puede coger un tour en bote o si eres más aventurero y quieres sentirte parte del paisaje puedes realizar un bautizo marino y bucear las bellas aguas de esta área marina protegida.
Seguimos el recorrido por la ruta 5 dirección norte para toparnos con la capital regional, Copiapó, tierra que alberga el mar de dunas donde se puede realizar sandboard o, también, apreciar el atardecer con una vista absoluta del desierto más árido del mundo.
La costa
Atacamela ofrece las mejores playas de Chile, lideradas por Bahía Inglesa y Playa La Virgen, con aguas turquesa y arenas blanca con un mar que asemeja una piscina por su tranquilidad, lo que hace de este un destino predilecto para quienes van con niños, ideal para descansar, a su vez, para realizar deportes acuáticos como kayak el que se puede adaptar a diferentes niveles de dificultad, buceo y stand up paddle (sup).
Tomamos la carretera nuevamente, pero esta vez para llegar hasta el parque nacional Nevado tres cruces, a más de 4.000 msnm la excursión por este parque nacional puede seguir haciendo avistamiento de los flamencos del desierto, donde podrás observar al flamenco chileno, son 60 mil hectáreas en las cuales podemos recorrer a través de senderos de tierra, refugios y miradores, podemos ir encontrando un entramado de lagos salinos y ecosistemas viviendo a sus alrededores.
En la salida norte de Atacama, nos encontramos con Chañaral que alberga el Parque Nacional Pan de Azúcar, donde el trekking es una excelente opción, así como los paseos en bote hacia la isla homónima.
Recomendamos realizar todas estas actividades con touroperadores registrados en Sernatur.
