Sobre el atacante de Trump, Thomas Matthew Crooks, el FBI reveló que su perfil en las redes sociales no contenía ningún mensaje amenazante.
El motivo que llevó a un hombre armado de 20 añosa atentar contra Donald Trump seguía siendo un misterio dos días después, con el sospechoso abatido y el FBI incapaz de identificar una ideología que pudiera haberle impulsado a atacar al expresidente.
El FBI tomó las riendas de la investigación del tiroteo en un acto de campaña en Pensilvania, en que el expresidente resultó herido, ensombreciendo la contienda electoral del 5 de noviembre con el presidente Joe Biden.
El Servicio Secreto, encargado de proteger a presidentes y expresidentes, se puso este lunes a la defensiva frente a las críticas por no haber detectado al pistolero cuyos disparos hirieron a Trump en la oreja derecha y mataron a un espectador.
“El personal del Servicio Secreto sobre el terreno actuó rápidamente durante el incidente, con nuestro equipo de contra francotiradores neutralizando al tirador y nuestros agentes implementando medidas de protección para garantizar la seguridad del expresidente Donald Trump“, dijo Kimberly Cheatle, directora del Servicio Secreto, en un comunicado.
Biden ordenó una revisión independiente sobre cómo el pistolero, que fue abatido por los agentes instantes después de abrir fuego, pudo estar tan cerca de matar o herir gravemente a Trump a pesar de la fuerte seguridad proporcionada por el Servicio Secreto en el acto del sábado en Butler, en el estado de Pensilvania.
Los primeros detalles sobre la investigación del autor de los disparos, Thomas Matthew Crooks, auxiliar de una residencia de ancianos, eran escasos.
Era un joven que trabajaba en un empleo de nivel básico cerca de su ciudad natal de Bethel Park, Pensilvania. Se graduó en el instituto en 2022 con fama de ser un compañero brillante pero tranquilo. Su orientador le describió como “respetuoso” y dijo que nunca supo que Crooks fuera político.
El FBI dijo el domingo que su perfil en las redes sociales no contenía ningún mensaje amenazante, ni habían encontrado ningún historial de problemas de salud mental. Según el FBI, Crooks actuó solo y aún no se ha identificado el motivo.
Crooks destaca entre otros recientes tiradores de alto perfil que abrieron fuego en escuelas, iglesias, centros comerciales y desfiles porque estuvo a centímetros de matar a un candidato presidencial de Estados Unidos, algo que no ha ocurrido en décadas.
Trump, que viajó el domingo a Milwaukee para hacer los últimos preparativos para aceptar la candidatura formal de su partido en la Convención Nacional Republicana esta semana, apareció reflexivo y desafiante a última hora del domingo.
Trump levantó el puño varias veces y pareció pronunciar las palabras “¡Lucha! ¡Lucha! Lucha!”,mientras bajaba las escaleras de su avión.
En una entrevista durante el viaje, dijo que darse cuenta de que estuvo tan cerca de ser asesinado le hizo reflexionar.
El Washington Examiner citó las palabras de Trump: “La realidad acaba de imponerse (…) Rara vez aparto la vista de la multitud. Si no lo hubiera hecho en ese momento, bueno, no estaríamos hablando hoy, ¿verdad?”.
“Quiero intentar unir a nuestro país”, dijo Trump durante el vuelo, según el New York Post. “Pero no sé si eso es posible. La gente está muy dividida”.
EL TIRADOR, UN REPUBLICANO REGISTRADO
El sábado por la tarde, Crooks logró colarse en una azotea situada a 140 metros del escenario donde Trump estaba hablando en Butler, Pensilvania. Entonces comenzó a disparar un rifle semiautomático estilo AR-15, que había comprado su padre, dijeron las autoridades.
Los disparos mataron a un hombre de 50 años,hirieron de gravedad a otros dos espectadores e impactaron en la oreja de Trump.
Las autoridades dijeron que se encontró “un artefacto sospechoso” en el vehículo del sospechoso, que fue inspeccionado por técnicos en explosivos y declarado seguro.
Residente en Bethel Park, a una hora de distancia de donde ocurrió el tiroteo, Crooks estaba registrado como votante republicano y en las elecciones del 5 de noviembre habría votado por primera vez.
Los registros públicos muestran que su padre está registrado como republicano y su madre como demócrata, y que cuando tenía 17 años Crooks hizo una donación de 15 dólares a una causa del Partido Demócrata.
En el momento del tiroteo, Crooks trabajaba como auxiliar de dietas en una residencia de ancianos, informó el administrador de la residencia en un comunicado.
“Estamos conmocionados y tristes al conocer su implicación, ya que Thomas Matthew Crooks hacía su trabajo sin motivo de preocupación y su verificación de antecedentes estaba limpia”, dijo Marcie Grimm, administradora del Centro de Enfermería Especializada y Rehabilitación Bethel Park.
Hace dos años, Crooks se graduó en el instituto local, donde no mostró especial interés por la política, según un compañero de clase que pidió no ser identificado. Sus intereses se centraban en construir computadoras y jugar.
“Era muy inteligente. Eso es lo que realmente me desconcertó, era un chico muy, muy inteligente, sobresalía”, dijo el compañero de clase. “Nunca dijo nada loco en ninguna conversación”.
Jim Knapp, que se retiró de su trabajo como consejero escolar en Bethel Park High School en 2022, dijo que Crooks siempre había sido “tranquilo como un ratón de iglesia”, “respetuoso” y retraído, aunque tenía algunos amigos.
Los residentes cercanos a la casa de los Crooks dijeron sentirse conmocionados e inquietos de que un intento de asesinato haya sido vinculado a una persona de la tranquila ciudad de 33.000 habitantes.
FUENTE T13