El ministro de Vivienda, Carlos Montes, asistió el martes a la comisión investigadora de la Cámara que indaga las acciones del Gobierno para la reconstrucción de las zonas afectadas por el incendio del 2 y 3 de febrero de 2024 en la Región de Valparaíso.
Ese siniestro arrasó barrios de Viña del Mar, Quilpué y Villa Alemana y el Ejecutivo ha sido duramente criticado por la lentitud en el proceso, que lleva apenas un 7% de avance, según lo que expuso el mismo Montes.
El secretario de Estado comunicó que el Ejecutivo asignó 2.748 subsidios a familias damnificadas en las comunas afectadas. Del total 205 viviendas han sido levantadas. Y de estas 91 han sido entregadas y 114 terminadas.
Además, 876 (32%) están en construcción. Y de ellas 43 se encuentran con un 75% de obras, lo que significa que hay 1.081 viviendas avanzadas.
En la sesión, los números que entregó el ministro fueron cuestionado por parlamentarios de la región. Es que el cálculo no es auspicioso: en el mejor de los casos, creen expertos, las viviendas se podrían entregar en unos dos años. Pero en el peor podría llegar a tomar muchos más tiempo, incluso 8 años.
Un problema de ritmo
Erwin Navarrete director de Ingeniería en Construcción de la U. Autónoma señala que “si se mantiene el mismo ritmo de construcción y en forma lineal, completar el 100% de las 2.748 viviendas proyectadas tomaría alrededor de 21 años y 5 meses, plazo que resulta inviable para las familias damnificadas que aún esperan una solución habitacional”.
“Pero esto no es tan así -advierte-, ya que de los 2.748 subsidios, cerca de 1.000 ya están en construcción y la construcción de viviendas podría tardar a lo menos dos años”.
El académico destaca, así, que considerando además los subsidios que faltan por asignar, “en no menos de 8 años se podría entregar el 100% de las viviendas siniestradas”.
Según dice, existen múltiples factores que explican la demora, como la burocracia, los costos crecientes, las dificultades técnicas y logísticas derivadas de los terrenos, y los problemas de financiamiento, entre otros.
Julio Nazar, docente de la Facultad de Arquitectura de la Universidad del Desarrollo, también apunta a que podrían faltar 20 años para que termine la reconstrucción, pero cree que será en un plazo menor.
Esto muestra “la ineficiencia del Gobierno y en particular del Minvu para responder a la emergencia de los mega incendios de Valparaíso”.
“Las 2.550 casas restantes deben resolverse en un tiempo mucho menor (a los 20 años). Pero es un plazo imposible de predecir dado entre otros, la contingencia electoral, la precariedad económica actual y por variables socioculturales asociadas al narco”, sostiene.
El economista Jaime Bastías, director de la Escuela de Auditoría y Control de Gestión de la Universidad Finis Terrae, apunta a que se debe considerar que la “parte burocrática inicial es la más larga”.
Con esto en cuenta, explica que “en construcción tradicional, una empresa grande puede tardar entre 6 y 9 meses por lote de 500 a 1.000 viviendas, según cronogramas de licitaciones del SERVIU y estimaciones de la CChC”.
“En el peor de los casos -complementa-, considerando 500 viviendas cada 9 meses por lote, 1 sola empresa tardaría aproximadamente 81 meses trabajando 1 lote a la vez”. Esto equivale a casi 7 años.
“En el mejor de los casos serían 1.000 viviendas cada 6 meses, es decir, un poco mas de 2 años. Todos estos tiempos se acortarían si hay mas empresas licitadas que trabajen en paralelo”, puntualiza asimismo.
Razones de la demora
El ministro Montes fue consultado ayer por las razones de la demora. A su juicio, el plan de manejo que les ha pedido Conaf junto con las exigencias de Sernageomin han sido un problema. “Las dos cosas podrían ser en paralelo y no requiere cambio legal”, explicó.
“Hay distintas realidades. Entonces, la particularidad de esta reconstrucción es que hay muchas realidades distintas”, dijo también el secretario de Estado.
Fuente: Emol.com