El presidente Milei vetó una ley aprobada en agosto que otorgaba más fondos a las universidades alegando que ponía en jaque su política de equilibrio fiscal.
Cientos de estudiantes de universidades públicas argentinas marcharon con antorchas este miércoles en protesta contra el recorte de presupuesto del gobierno de Javier Milei, en una jornada que vio una escalada del conflicto estudiantil con tomas de facultades en todo el país y clases trasladadas a las calles.
Los estudiantes marcharon al caer la tarde desde la facultad de Medicina, sobre cuya fachada colgaban carteles como “facultad tomada”, hasta el edificio donde funciona la Secretaría de Educación, a unas siete calles.
Otras facultades tomadas, como Psicología, Filosofía y Letras y Ciencias Sociales, llevaron los pupitres a la calle en protesta contra al ajuste económico a las altas casas de estudio, donde cursa el 80% de los universitarios de Argentina.
“Es importante que se hagan las clases públicas y venir, pero recordando que es una situación muy triste la que estamos pasando”, dijo Lola Cortez, una estudiante de Comunicación Social de 22 años, durante una pausa de una clase pública.
El presidente Milei vetó una ley aprobada en agosto que otorgaba más fondos a las universidades alegando que ponía en jaque su política de equilibrio fiscal, pese a que el Congreso estimó que representaba 0,14% del PIB.
Los fondos buscaban compensar la pérdida del poder adquisitivo de los salarios de profesores y personal administrativo en el marco de una inflación que llegó en septiembre al 209% interanual, entre las más altas del mundo.
La falta de actualización salarial ha provocado renuncias masivas de profesores e investigadores, denunciaron rectores, algo que puso en alerta a los centros de estudiantes.
Joaquín Valeiras, un estudiante de sociología de 20 años que también asistía a una clase en la calle tras la toma de su facultad, dijo a la AFP: “Vine porque si los docentes están luchando por una causa que les parece noble, nosotros podemos apoyarlos desde nuestro lugar”.
No obstante, para algunos alumnos la toma de facultades es un incordio. “Podés estar a favor o en contra, pero las medidas nos perjudican. Estamos perdiendo clase y contenido”, comentó por ejemplo Alberto Baldivieso, un estudiante de medicina de 24 años.
Sindicatos docentes anunciaron una huelga de 24 horas para este jueves y otra por 48 horas para lunes y martes próximo.
En otras dos ocasiones ya se realizaron marchas que tuvieron una masiva adhesión.
En todas las universidades públicas el clima es de efervescencia, con asambleas diarias donde se discute poner fecha a una marcha federal que confluya en Buenos Aires, aún en ciernes.
El presidente Milei advirtió el martes que no cederá a los reclamos y avanzó en ordenar auditorías a las universidades a las que acusó de esconder “curros” (delitos).
La ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, afirmó este miércoles que las protestas estudiantiles “quieren generar una revuelta, al modelo chileno”, al citar las violentas movilizaciones que ocurrieron en el vecino país en 2019.
FUENTE T13