Se trata de Camilo Araneda, quien tiene un cargo clave en el Gobierno como jefe de la Unidad de Gestión de Conflictos que depende de la Subsecretaría del Interior.
Un nuevo antecedente aparece respecto al caso Monsalve, luego de que el medio The Clinic accediera a la declaración de uno de los funcionarios del gobierno que se enteró días antes sobre la acusación contra el ex subsecretario del Interior, Manuel Monsalve.
Se trata de Camilo Araneda, quien tiene un cargo clave en el Gobierno como jefe de la Unidad de Gestión de Conflictos que depende de la Subsecretaría del Interior.
En esa línea, la declaración de Araneda da cuenta de que la víctima le relató lo que había sucedido con Monsalve alrededor de una semana antes de que la denuncia se hiciera pública. La afectada acudió a él en busca de orientación, aún sin haber decidido qué pasos seguir.
En la declaración que entregó ante los fiscales, Araneda también mencionó que tras escuchar el relato de la víctima, se comprometió a no divulgarlo.
“(Luego de la conversación) Entramos juntos al Palacio, solicitándome a través de una promesa que no contara a nadie lo que ella me develó, como también que no hiciera nada al respecto. Hechos que hasta este momento recién hago presente ante esta declaración”.
Sin embargo, lo que no se sabía hasta ahora es que que durante esa conversación, la víctima le manifestó a Araneda su intención de hablar con la Ministra de la Mujer, Antonia Orellana, pero el asesor la habría persuadido para que se tomara unos días para “pensarlo mejor”
Así lo confirmó la versión que entregó el padre de la denunciante a los fiscales, donde el progenitor de la víctima señaló que su hija le comento que “le dijo al encargado de conflicto, de nombre Camilo Araneda, quien trabaja dentro del Palacio de La Moneda, que a él también le contó todo lo que le sucedió y ésta persona como que le bajó el perfil. Mi hija me dijo que le comentó a Camilo que tenía pensado hablar con la Ministra de la Mujer, pero éste le respondió que mejor sacara licencia médica para que lo pensara bien”.
Por su parte, Araneda, declaró ante los fiscales que su única recomendación fue que la víctima pidiera una licencia médica, ya que ella le había solicitado que no compartiera su historia con nadie.
Cabe recordar que tras las acusaciones, el ex subsecretario del Interior se encuentra cumpliendo la medida cautelar de prisión preventiva en la cárcel de Rancagua, mientras se desarrollan las diligencias investigativas en el plazo de cuatro meses que dictó el magistrado Mario Cayul durante la audiencia de formalización.
FUENTE T13